Noches de referendum.

Aquellas noches de verano,

que recuerdo, y que anhelo,

el silencio, caricias perdidas entre el calor, sentimientos rasgando las sábanas, el ventilador, que nos miraba intentando disipar, los recuerdos de mañana.

Te quiero.

Te necesito.

Te voy a recordar hasta la existencia.

Y aquí nos ves, en una guerra de trincheras, contra aquello que fuimos, contra aquello que amé. 
¿Qué será del amor cuando lo odiamos una y otra vez, y volvemos a él?

Lo que nos pide, por momentos de película, no es sino, un pequeño pago por su servicio. 

Lo que nos deja, cuando se va, son aquellas noches de verano, sentimientos de repulsión, y unas ganas increíbles de vomitar lo vivido.

"Mis manos se quedaron vacías, de tanto llenarlas. 

De perderlas en ese agujero oscuro que es tu memoria.

Pero te quiero decir, que acabé amputándolas ."